La cara ‘oculta’ de Tómbola

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La cara ‘oculta’ de la Tómbola.

Durante el mes y medio en el que Tómbola permanece abierta hay una tarea ‘oculta’, pero muy necesaria, de reposición, recuento y atención a los pequeños detalles. Y hoy, queremos sacarla a la luz.

Como dice Ana Urmeneta, coordinadora de Tómbola, todos los días reparten los mismos premios. Aunque es verdad, que si un domingo se vende más hay más posibilidades. Pero ¿cómo se hace para que todos esos regalos lleguen a los afortunados?

Todos los días, a última hora de la mañana, hay un responsable que se encarga de realizar el pedido de artículos para el día siguiente. Esto se hace en función del espacio que haya, y también de las ventas que se prevean, por ejemplo no es lo mismo que vaya a hacer bueno o malo, o, si es sábado o lunes. Una vez elaborada la hoja del pedido se traslada al almacén.

Después, a primera hora de la tarde en la trasera de la propia Tómbola se preparan entre veinte y treinta palés vacíos, para cuando lleguen los premios. Es necesario utilizar un camión grande para poder transportarlos todos.IMG_2814Los nuevos premios llegan todas las mañanas. Exactamente los preparativos empiezan a las siete menos veinte, en un almacén de la comarca de Pamplona. Allí va el equipo responsable de cargar en un camión el género que debe reponerse.

Para cuando el reloj marca las 8 de la mañana, el camión ya ha llegado al Paseo Sarasate. Una vez ahí se descarga, y se empiezan a colocar y ordenar los premios en las estanterías del depósito. También entre las tareas que se hacen cada día, está la de colocar el escenario situado en el inicio de la tómbola. En el cual miércoles y viernes actúan diferentes grupos para amenizar la jornada en las llamadas “Tardes de la Tómbola”. Su estructura y soportes es lo último que sale del camión, una vez ya se ha vaciado de los regalos.

Todo esta bien pensado “Lo que queremos es que a las 10:00h, cuando abrimos, esté todo perfecto y no se note nada”, dice Ana Urmeneta.

La llegada diaria del transporte es parte de un guión establecido. Siempre es el mismo proceso, aunque en San Fermín es necesario que se haga dos veces, una por la mañana y otra por la tarde, porque se venden muchos más boletos.

Sin embargo, esto no es más que la continuidad de todo un año de preparación. La tómbola es un evento muy especial, se necesita de voluntarios, ciudadanos y operarios para que funcione, y para que año tras año se siga repartiendo suerte e ilusión.

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